miércoles, octubre 31, 2007
Supongo
lunes, octubre 29, 2007
Correspondencia
domingo, octubre 28, 2007
Comunidad, colectivo y caídos por Dios
sábado, octubre 27, 2007
Un cura se confiesa
jueves, octubre 25, 2007
A rezar

miércoles, octubre 24, 2007
Yo no me tiro porque me lo paso muy bien fuera del hoyo
lunes, octubre 22, 2007
Memoria histérica
jueves, octubre 18, 2007
La madre Teresa perdió la fe...
"La Madre Teresa de Calcuta, premio Nobel de la Paz, tuvo durante casi 50 años dudas de fe, según informa hoy la revista Time Magazine, difundida por la web de la Cadena SER, en base al contenido de cartas aún no publicadas", según informó El País y se puede leer en esta página.
Resulta que esta noticia ha causado algunas 'dudas' y oscuridades en la fe de no pocas personas. Me lo comentaba un muchacho antes de ayer: ¿Qué opinas de esa noticia? ¿no te parece inquietante? ¿dónde está Dios?.
En primer lugar, es bueno confiar los análisis sobre la fe a gente con fe. Es importante. Cuando uno pone a la madre Teresa en la parte de su periódico dedicada a 'gente' (vide supra), significa que quizás no estemos capacitados para enterarnos de casi nada. Gente: como C. Crawford o Antonio Banderas. Estupendo: la madre Teresas codo con codo con Alfredo Landa. Está bien.
Si pasamos a la Madre Teresa de 'gente' a 'religión' quizás la cosa mejore. Y entonces se entiende que la fe no es un gustirrinin interior que mueve permanentemente al sujeto con una clarividencia total y absoluta sobre el mundo y las cosas. No. "Te lo agradezco, pero NO".
Un ejemplo análogo nos puede ayudar a entender la cuestión. Cuando una esposa tiene que asistir día y noche a su marido enfermo, que casi no puede hablar, que no le corresponde para nada... ¿Tendrá o no dudas muchas veces? ¿y significará eso que no le ama?. ¡Por Dios!.
Somos humanos. Y los humanos tenemos dudas, avances y retrocesos. Pero eso no significa que no amemos o tengamos fe, según los casos. Es más, como dice Don José María, esa oscuridad es prueba evidente de una fe más pura que se torna en confianza total, solo posible para los muy santos. La madre Teresa no perdió la fe; al contrario, tuvo más fe que nadie.
Por eso, si dudas, si te cansas, si, a veces, algo desesperas: bienvenido al grupo de la gente normal.
Y aún otra conclusión: se ve que la gente sin fe piensa que los creyentes son como Panzer que nunca retroceden y siempre ven todo con claridad. Agradecemos su valoración, porque significa que no ven sino hombres muy capaces de creer, amar y esperar. A ver si es verdad...