sábado, septiembre 30, 2006

Allá va

Hay dudas pendientes. Un montón. Así que allá va una ligera respuesta de algunas de ellas.
La primera, y la más sencilla: el record del entradas en el blog se alcanzó hace varias semanas (123 entradas en un día). Lo que ocurre es que ahora mismo nos hemos afincado en cifras muy buenas (entre 90 y 100 visitas diarias), con días más intensos, como ayer, en el que entraron 112. Para más curiosidades, cuando el contador me mande el informe semanal lo pincho en el blog para que podáis verlo.
La segunda hace referencia a los requerimientos de Pitilinacio. La verdad es que eso de Pitilinacio me encanta, y si nos explicas de donde viene me hará mucha ilusión. A mi, sinceramente, no me ha parecido apreciar falta de empatía en los comentarios. De haber sido así, no habría habido la actividad que hemos tenido en estos días. Es cierto que uno se puede encender en algunos momentos, ser arrollador en otros (hablo por ambos lados)... pero eso no me parece una imposición, sino un encendimiento. Son cosas distintas.
Querido Pitilinacio, respecto al tema de la confesión, que sale ahora a colación, contesto brevemente y, si Dios quiere y preguntáis, el lunes vuelvo a la carga. Si he entendido bien, Pitilinacio sugiere que ese sacramento debe reservarse para ocasiones muy especiales fruto de pecados graves o de periodos de tiempo prolongados. Así fue pensado durante mucho tiempo en la vida de la Iglesia. Por eso, un mandamiento de la Iglesia es el confesarse una vez al año, con intención de asegurar unos mínimos que, de hecho, habitualmente no se cumplían. Sin embargo, todos los Papas del siglo XX han recomendado una práctica que consideran ventajosa para el cristiano: la confesión (individual) frecuente. Esta consideración de la necesidad de la confesión frecuente viene motivada por el redescubrimiento por parte de la Iglesia y el magisterio de la necesidad de santidad de sus fieles. O sea, que para estar en forma, más o menos, basta cuidarse un poquito. Para ser deportista de élite, son necesarias más cosas: un entrenador y un cuidado permanente, incluso de las cosas más pequeñas e insignificantes. Por eso, entiendo que la confesión frecuente es cosa buena para el cristiano, y al menos así lo practico yo también.
HORARIOS: Veremos su eficacia, porque a veces no te pasas las horas en blanco, resultando que no viene nadie a su hora y muchos fuera de ella (lo cual no importa en absoluto, antes bien todo lo contrario). Alla va: de Lunes a viernes estoy de 6h55 a 7h25 (de la mañana), de lunes a miércoles de 9h a 9h30, y de miércoles a viernes de 20 a 20h30. En este último horario dependo de que estemos los tres curas, porque uno celebra, otro atiende despacho, y otro confiesa. Pero el año pasado estuve casi todos los días durante ese tiempo en el confesonario, así que a priori parece que no habrá problema. Es provisional, dentro de un par de semanas será confirmado.
Aun quedan preguntas pendientes acerca de cuándo y cómo tomé la alternativa y me decidí a saltar al ruedo. Estas cosas a veces están en uno desde pequeño, pero entonces no les das más importancia. Pero la adolescencia y la juventud son épocas donde estas cosas, necesariamente, se piensan. Fue entonces cuando, primero tranquilamente en Madrid, y luego en un viaje con el Papa en Loreto, me decidí a ser sacerdote. Luego hubo un par de años de lucha, porque que Dios quiera no significa, en absoluto, que a uno le apetezca. Y ese era mi caso...

jueves, septiembre 28, 2006

el problema no es la libertad, sino la verdad

Ante todo, gracias. Gracias, medicodelapaz, porque es una gozada leerte. Aqui hay tomate, pero sobre todo hay un tío que sabe mucho. Muchísimo. Gracias a los múltiples anónimos, porque, salvo en algún caso, exponéis vuestro fondo cuidando la forma. Así que, una vez claro que todos sabemos filosofía, no nos acostumbremos a órdagos como: "estudia más filosofía" porque otros opinan que la tienen "sobresaliente". Pampifam, sigue dándole caña. Da gusto ver tu espíritu positivo en todo. Y a todos os digo una cosa: animad a gente que tenga vuestra opinión, sea cual sea, a que la exponga. Es tremendo. Por todo ello, siento los retrasos en publicar los comentarios. Trato de ser lo más rápido posible, pero esta mañana abrí mi 'centro de trabajo' (parroquia) a las 6h45 y son las 22h30 y aún no he salido de allí. Para más inri los otros curas se fueron hoy, y estuve sólo un poco acelerado. Perdón por la tardanza.
Por todo ello, antes de leer lo que sigue, invito a que echéis un vistazo a los comentarios. Todos merecen mucho la pena.
Me parece que anteponer la libertad a cualquier otra referencia externa, especialmente la verdad, es algo tremendamente peligroso. A la vez, me resulta chocante que se pueda decir que "no hay nada que sea verdad o mentira". Digo que me resulta chocante, porque al menos una verdad habría: que no existe la verdad. ¿Paradójico?.
Y respecto a la primacía de la existencia y de libertad sobre todo ya tenemos cierta experiencia histórica. Así obró Hitler, por ejemplo. La voluntad de poder como elemento primero y único del obrar moral (por llamarlo de alguna manera, puesto que cuando la libertad es lo único, la moral no existe).
De todas maneras, me parece que la cuestión del suicidio asistido no es en absoluto confesional, como puede sugerirse. Os transmito unas lineas de una sociedad (la griega) que, por lo menos en su reflexión sobre las cosas y el hombre, tenía muy claro la existencia de una naturaleza, una verdad y una felicidad. Es de un tal Hipócrates. Ya me diréis.

"Juro por Apolo el Médico y Esculapio y por Hygeia y Panacea y por todos los dioses y diosas, poniéndolos de jueces, que éste mi juramento será cumplido hasta donde tenga poder y discernimiento.

A aquel quien me enseñó este arte, le estimaré lo mismo que a mis padres; él participará de mi mandamiento y si lo desea participará de mis bienes. Consideraré su descendencia como mis hermanos, enseñándoles este arte sin cobrarles nada, si ellos desean aprenderlo.

Instruiré por precepto, por discurso y en todas las otras formas, a mis hijos, a los hijos del que me enseñó a mí y a los discípulos unidos por juramento y estipulación, de acuerdo con la ley médica, y no a otras personas.

Llevaré adelante ese régimen, el cual de acuerdo con mi poder y discernimiento será en beneficio de los enfermos y les apartará del perjuicio y el terror. A nadie daré una droga mortal aún cuando me sea solicitada, ni daré consejo con este fin. De la misma manera, no daré a ninguna mujer supositorios destructores; mantendré mi vida y mi arte alejado de la culpa.

No operaré a nadie por cálculos, dejando el camino a los que trabajan en esa práctica. A cualesquier casa que entre, iré por el beneficio de los enfermos, absteniéndome de todo error voluntario y corrupción, y de lascivia con las mujeres u hombres libres o esclavos.

Guardaré silencio sobre todo aquello que en mi profesión, o fuera de ella, oiga o vea en la vida de los hombres que no deba ser público, manteniendo estas cosas de manera que no se pueda hablar de ellas.

Ahora, si cumplo este juramento y no lo quebranto, que los frutos de la vida y el arte sean míos, que sea siempre honrado por todos los hombres y que lo contrario me ocurra si lo quebranto y soy perjuro. "
POR CIERTO, UN RECORDATORIO. ES VIERNES, OS INVITO A MISA DONDE QUERÁIS PARA REZAR POR LA UNIDAD ENTRE LOS PUEBLOS Y LAS RELIGIONES, ESPECIALMENTE POR NUESTROS HERMANOS DEL ISLAM. EN LA MÍA TENÉIS A LAS 7H30, 10H Y 20H.

miércoles, septiembre 27, 2006

Pues si, pues si

Como agua de mayo. Así describo yo los comentarios de ayer: vienen como agua de mayo. Y lo digo especialmente por la voz 'disonante'. Me alegra infinito comprobar que cualquiera, siempre que proceda con respeto, pueda expresar sus comentarios en este blog. Claro que si. El tema es claro: la eutanasia. Por cierto, que odio este término: eutanasia (bien morir) es como murió la última persona a la que ayudé a morir, rodeado de lo suyos, pidiendo perdón, dando las gracias y reconciliado con Dios. Porque, amigos, os digo una cosa: ¿habéis visto a alguien morir?. Es tremendo. Y ya llevo más de 5 ó 6. Es una auténtica enseñanza. A partir de ahora a eso que llaman eutanasia lo llamaré suicidio asisitido.
Y no siempre todos estamos de acuerdo. ¡Ánimo y a expresarse!. Me parece que es lo óptimo de este foro. Es más, ójala hubiera mucha más letras que difieran con lo que yo pueda pensar. Eso me ayudará 'infinito' (como se dice ahora) a repasar y afianzar mis propias certezas. ¿Por qué no?.
Por todo ello, ánimo, querido lector. Escribe, debate, pelea, difiere... ¡exprésate!. En el fondo, la cuestión es la siguiente: ¿debe el estado defender la vida del hombre en todos los casos? ¿se admite la excepción del suicidio (asistido o no)?. Llama a tus amigos y vierte aquí tus reflexiones, cualquiera que sean. Eso es vida.
Os animo a que leáis el debate de ayer. Sólo añado una cosa que me contó un sacerdote muy amigo mío. Recibió un SMS de un chico de su parroquia: "Gracias por todo. Has sido un buen amigo para mi. Hasta siempre". Este sacerdote se puso un poco tenso, e intentó localizar al muchacho. Dio con él en su casa, pero no quiso ponerse. Acto seguido, el sacerdote salió de su iglesia para ir a casa del chico. Entretanto, él intentaba sin éxito cortarse las venas. Ante su frustración, incapaz de conseguirlo por sí sólo, huyó de su casa. El sacerdote, junto con sus padres y amigos anduvo buscándolo varias horas. Horas de angustia. Por fin dieron con él tirado en un parque, llorando. Avisó al SAMUR, le asistieron y finalmente, después de una noche en el hospital, volvió a casa.
Solo una pregunta: según los parámetros que se plantean sobre la libertad del individuo de quitarse la vida, ¿quizás no hubiera sido lo humanitario ayudarle a hacer aquello que él no se atrevía a hacer?. Era una decisión, libre y consciente. El consideraba que tenía suficiente razón para quitarse la vida. ¿Qué alegar en contra de ello?.
Gracias a Dios, hoy el muchacho está muy bien. Se pueden decir muchas cosas, pero hay modos de pensar coherentes, y los hay menos, cargados de excepciones, vericuetos y letra pequeña. ¿Cuál prefieres?.

martes, septiembre 26, 2006

Un tema recurrente

No sé si habéis visto en el telediario dos noticias que, por lo menos a mi, me han llamado la atención. La primera hace referencia a la incriminación que van a hacer a un padre de familia que dejó morir de hambre a su hijo de dos o tres años. Creo que le van a caer varios años de carcel. El delito: "homicidio involuntario".
Por otro lado, completaban la noticia diciendo que se va a retirar la custodia de un niño a una persona que está cometiendo la misma fechoría que la anterior. El estado se hará cargo del muchacho, para preservar su salud ante la pasiva afrenta de su progenitor.
Finalmente, se ha reavivado la polémica en Italia a propósito de un hombre que desea suicidarse y no puede. Alega que quiere morir dignamente. Es semejante a aquello que ocurrió en España con Sanpedro y que fue inmortalizado en "mar adentro".
Me parece sugerente tener en cuenta estas noticias en su conjunto para caer en la cuenta del papel fundamental del estado de preservar la vida de sus ciudadanos. Resulta que por un lado se incrimina a un hombre por no alimentar a su hijo de dos años, pero por otro lado se replantea la cuestión del suicidio asistido. Se puede alegar que en un caso no hay voluntad de paciente y en el otro si. Sin embargo, todos sabemos que quién toma las decisiones de un niño es su padre, responsable de una libertad inexistente por parte de la criatura. Si resulta que esa persona considera que lo mejor para su hijo es fallecer, ¿qué diferencia hay entre una cosa y otra?. El responsable de la libertad de esa persona sin uso de razón puede considerar la muerte algo óptimo... ¿por qué no?.
Esto, que es una barbaridad, es la misma atrocidad que nos pone los pelos de punta a muchos cuando se plantea que algunas personas quieran decidir la muerte de otras o de si mismas llevadas por cualquiera que sea la causa. El estado español, a día de hoy, es coherente al respecto del suicidio asistido: protege la vida del niño no alimentado y del anciano desauciado, porque sabe que la libertad no es omnipotente, porque sabe que hay valores que la ordenan y determinan hacia el bien, aunque uno no lo vea. La pregunta es: ¿durará mucho?.

lunes, septiembre 25, 2006

Varias informaciones

Ayer me llegó un SMS que decía lo siguiente: "el viernes, todos a Misa para demostrar a los musulmanes cómo se mueven los cristianos por nuestra religión si atacar a otras". ¿Qué os parece la idea?. Hay que huir de toda confrontación, pero no estará mal que todos vayamos a Misa el próximo Viernes para pedirle al Señor la reconciliación de todos: que los cristianos seamos siempre prudentes y tolerantes, como corresponde a nuestro espíritu, y que el resto del mundo conozca la civilización del amor y no del odio y la ira.
Por eso, quería aprovechar esta ocasión para invitaros a todos, el próximo viernes, a ira Misa y a rezar por todo el mundo, especialmente los de otras religiones y los que están en situaciones difíciles.
Además, os animo a escribir cartas al director comentando esta y otras iniciativas. Está chupado, casi nunca las publican, pero crean conciencia social. Yo acabo de mandar una a el mundo denunciando los anuncios que exponen en sus páginas, y que desdicen de la calidad del rotativo. A ver que pasa.

sábado, septiembre 23, 2006

De amicitia

"Un amigo es como otro igual". Del amigo se espera lo mejor. De él se supone, como virtud indispensable, la fidelidad. Amistad es una palabra muy bonita, que deberíamos tener presente en nuestros labios y en nuestra vida como un motor de todo nuestro obrar.
Como un regalo han sido, para mi, mis amistades. Es un ejercicio intenso, y maravilloso, el pensar, con el curso de los años, lo que ha supuesto cada persona y, en concreto, cada amistad, en la propia vida. Pienso en aquel compañero, que me enseñó a apreciar lo bueno del deporte, de la lucha, de la pasión por las cosas. Recuerdo a aquel profesor-amigo, que confió en mi, e hizo que aprendiera el valor del estudio, de ser afanoso (studium). Pienso, cómo no, en las amistades de la adolescencia, que, quizás como a todos, me enseñaron a soñar. Y hoy, desde una perspectiva diversa, pienso en mis amistades sacerdotales, que me han enseñado la entrega. Y en las amistades entabladas con mis fieles, que me enseñan la ternura, la fidelidad, la fecundidad, la dedicación, la laboriosidad...
A todos les debo mucho, aunque a uno le debo todo. Que cada día sea distinto se lo debo a aquel a quien me gustaría parecerme como a otro igual. Muchos piensan que la religión no sirve. Y es verdad: no sirve. No es un martillo hidráulico ni una agenda eletrónica. El marco de la religión es el campo de juego de la amistad: el disfrute. Es un disfrute que, además, transforma, crece, expande, explosiona.
Hay lectores del blog de todo tipo. ¡Ojalá estuviera plagado de no creyentes! porque, en tal caso, podría comunicar la alegría de una amistad cuya sóla mención genera envidia. Amigo de Dios, amigo de Jesucristo. Es una experiencia distinta, única. Cada mañana, ante la perspectiva de un día exactamente igual que el anterior, es necesario recordar que hay un porqué, un motivo, por el cual luchar, por el cual darlo todo. Al ponernos en pie cada mañana, pensar: "ahí estará mi Amigo esperándome". Y de él aprenderé alguna cosa, muchas cosas, todas las cosas. Nunca podré prescindir del día que comienza, Señor, porque nunca quiero haber prescindido de tu amistad.
Ánimo. No hay día igual, para el que vive de una amistad que siempre permanece.
"El amigo que permanece constante" podríamos matizar "será como otro igual".

viernes, septiembre 22, 2006

Demasiadas preguntas

Demasiadas preguntas y demasiado ocurre en el mundo cómo para intentar acordarse de todo. Por eso, hacedme el favor de recordadme, periódicamente, las noticias que vayan quedando en el tintero, porque soy capaz de olvidarlas, y no por mala voluntad, sino porque la vida no da para mas.
¡Cuántas paradojas las del mundo actual!. Resulta que 'algunos' del mundo musulman declaran un día de ira contra el Papa o algo así. Denuncian de este modo la presunta 'injusta' acusación del pontífice a su religión. Es paradójico: esos grupos demuestran por la ira y la violencia que no son ni iracundos ni violentos. Es curioso. A este respecto, por fin, alguien a dicho algo. Échadle un vistazo a http://www.analisisdigital.com/Noticias/Noticia.asp?id=15319&idNodo=-3. Interesante.
Por otro lado, he leído en un blog de internet a un chaval diciendo que, total, para qué creer: el fruto de las religiones es el enfrentamiento. Y añade que nada se puede dar por cierto. Es curioso, nada es verdadero excepto una cosa: que no hay verdad ninguna. Ojo al dato. Le he metido un comentario en el blog, dando la dirección del mío. A lo mejor, alguno de sus lectores ya lee el nuestro. Yo les animo: vale la pena pensar que hay algo. De otro modo todo puede ser muy triste. Y os animo al resto a que pongáis comentarios en otros blogs, preferiblemente aquellos que tengan un cierto número de lectores. Es una gran publicidad.
Y aún hay una tercera paradoja que nos afecta a todos. En esta, al contrario de los anteriores, sería fantástico que cayeramos todos. Hace referencia a la vida cotidiana y lo extraordinario. ¿Se puede ser féliz llevando una vida normalísima? ¿No acabamos de empezar y ya parece que llevaramos una vida, otra vez en las mismas cosas, otra vez con los mismos problemas?. Los niños, el colegio, la universidad, los hermanos, los padres, la televisión, el fútbol... todo igual. ¿No te torra un poco?. Escribe, y cuenta un poco el secreto de tu felicidad. A lo mejor, entre todos, sacamos algo en claro. Algunos se van a Zambia de vacaciones, otros cambian de coche, otros proyectan un futuro distinto...¿tú que haces?.
Todo esto viene por la pregunta de Bildenberg: si pudieras estar donde quisieras, ¿qué eligirías?. Pues, siento lo triste de la respuesta, eligo estar donde estoy y hacer lo que hago. Fue una lección que aprendí al entrar al seminario. Había estado un año en la universidad, y durante un cierto tiempo pensé que aquello era tiempo perdido. Pero, con el paso de los meses, me di cuenta de una cosa: lo mejor, el sitio donde estás en cada momento. Es lo más conveniente, y conviene bregar al máximo para disfrutar de ello con mucha pasión. Colegio, universidad, seminario, sacerdocio, tal parroquia, tal otra... donde toque, eso es lo mejor porque, para mi: "lo bueno o lo malo no es lo que viene de fuera. Nace del corazón del hombre".
¿Para tí qué?. Enróllate y echanos una mano a todos. ¿De donde sacas fuerzas para el día a día?.

jueves, septiembre 21, 2006

16

Hay fuerzas en la tierra más potentes que las armas, las amenazas o el dinero. Hoy me ha dado por recordar aquellos años de seminario, más de siete, en los que tuve tres formadores, dos directores espirituales, un rector... De este tiempo recuerdas muchísimas cosas. Es como un noviazgo. Y encuentras gente a la que le caes bien, o menos bien, que te tratan fenomenal, o un pelín peor. Gente que te juzga inmediatamente por tu forma de ser, o por tus ideas políticas o religiosas. Encuentras de todo. Pero, por encima de todo, recuerdo la figura del que me formó durante los dos primeros años: Pablo González Díaz. Era un sacerdote que, por encima de todo, te quería. Toleraba mis defectos como un padre, aguantaba como una madre e intentaba que cada uno de nosotros notáramos que no estabamos delante de un juez, sino de un amigo. Era un auténtico compañero de camino. Su tolerancia ante mis defectos, su paciencia ante mi impertinencia y el cariño que derrochó y derrocha con nosotros me da que pensar. He tardado casi 10 años en darme cuenta de todo esto, pero hoy soy consciente de que ese cariño es uno de los pilares fundamentales de un cristiano y de un sacerdote. ¡Se quiere tanto a aquellos que te han encomendado (tu familia, tu amigos, tus fieles)!. ¡Ojalá este blog refleje si quiera un uno por cien de lo mucho que Pablo dio por nosotros y que todos nosotros deberíamos dar por los nuestros!. El cariño: que fuerza tan impresionante.
¿Donde estabas tú cuando cumpliste 16 años? ¿lo recuerdas?. Hay jóvenes lectores que, quizás, ni siquiera los han cumplido todavía. Y otros que los duplican, triplican y aún más. ¿Te acuerdas de algo?.
Yo, perfectamente. He visto un comentario de un antiguo compañero de colegio, y me consta que ya son unos cuantos los enganchados a esta página. ¿Os acordáis?. Fue el último año en el cole para muchos de nosotros. Luego nos cambiamos de centro para prepararnos para selectividad. Muchos decís que buscabais una formación más completa; no os engañéis, buscabamos aulas donde hubiera chicas y punto. Al menos así lo reconocían nuestros padres, sin desagradarnos en absoluto. ¿O no?.
Dieciseís años. Entonces era tercero de BUP. Para mi, un año casi decisivo. Desde 8º de EGB (13 años) me había afincado en las buenas notas, gracias a que un profesor me había agitado y había confiado en que yo podía y debía sacar todo sobresalientes. En tercero de BUP eso ya era algo ‘asumido’. Pero, sobre todo, lo pasabamos muy bien. Fue el año en el que fuimos al primer concierto, y tuvimos que devolver a uno a su casa porque algo le sentó mal (?). Fue tremendo, porque le adoctrinamos en el viaje de vuelta acerca de cómo debía disimular su estado, un tanto limitado por sus circunstancias. Aguantó mientras estuvimos delante. Luego la lió, pero ya no estabamos delante para verlo. Menos mal.
Fue el año en el que empecé a rezar. Diez, quince minutos todos los días. Era como hablar a una pared. Absolutamente. Pero me fiaba de aquellos que me insistían en las bondades de este camino. Y lo seguí. ¡Qué insensato!.
Fue el año en el que se aquilataron amistades, algunas ahora repescadas, y difíciles de perder. Por un lado fuimos los de ciencias, por otro los de letras. Y de vez en cuando nos vemos: uno guardia civil, el otro produce videos rosas para “aqui hay tomate”, yo soy cura... ¡Qué chula es la vida, madre mía!. Fui a Roma por segunda vez, y me pusieron muy delante de Dios para que viera claro qué quería de mi. Estaba clarísimo: casarme y tener un buen trabajo. No cabía duda. ¡Menos mal, que si llega a ser otra cosa...!.Que años aquellos. Los dieciséis. El mundo por sombrero. Muchas felicidades a todos los que los cumplan hoy y que aprovechen: se pasa muy bien en la sencillez de los 16 (si es que aún existe), porque todo lo ordinario es extraordinario cuando hay tantísima ilusión. Ojalá no la perdamos nunca, o estemos dispuestos a recuperarla siempre.
Mañana más, intentando responder preguntas. Nunca caen en saco roto... aunque lo parezca.

miércoles, septiembre 20, 2006

¿Daba miedo el toro?

Estudiantes, ¿qué tal el comienzo de curso? ¿qué tal la vuelta al colegio?. A ver si os estiraís y contaís algo, que siempre apetece leeros. Y a los padres, ¿ya os ha absorvido la actividad sin freno?. ¡Ánimo!, que esto no ha hecho más que empezar. Por cierto, mañana cumpleaños de monitor de plan (y de Don José María Valero), que debe cumplir 16. Llenemos su blog de felicitaciones. Lo podéis buscar en alguno de los comentarios que ha hecho en este blog, y luego un comentario de felicitación. No lo dejéis de hacer: le conozco y es un tipo estupendo.
¿Que si daba miedo saltar al ruedo? No daba miedo... daba pavor. Lo cierto es que luego uno se acostumbra, en el buen sentido, y resulta que empieza a quitar hierro al 'drama' de aquellos primeros momentos... pero conviene ser sincero con un mismo y reconocerlo a tumba abierta: el cambio de tercio (o de vida) era un órdago a la grande que costaba algo más que un riñón aceptar.
Prueba de ello es que un servidor se resistió durante meses a dar verosimilitud a esta posibilidad. Uno tiende a ser un poco empiristia y volteriano, o sea, a exigir pruebas visibles, palpables, medibles, pesables. Y de esas se encuentran pocas. No tienes a alguien delante que te dice: "te quiero". No escuchas con nitidez absoluta palabra alguna y sin embargo... notas que algo no va. No va porque si, de resultas, decides apartarte de la cuestión que te inquieta, te quedas peor. Y si te acercas, la congoja era total. Surgió, al menos para mi, un alud de preocupaciones: padres, estudios, chicas, hijos, futuro, bienestar, incertidumbre, caos, antisocial, anacrónico...
No conviene quitar hierro a la tensión de aquel momento. Lo reconozco: no fue fácil. Especialmente (y curiosamente) el tema familiar. Pensé que nunca lo aceptarían, pero luego resultó que en unos pocos meses estaban más felices que perdices. Hoy puedo asegurar que son padres de los más felices del mundo.
No voy a eludir la cuestión. Contestaré pregunta a pregunta, porque merece la pena. Si algunas son repetitivas, las acumularé. Tu comentario de ayer no será valdío. Lo prometo.

martes, septiembre 19, 2006

fishers of men

Ayer tuve la oportunidad de ver un DVD hecho en los Estados Unidos sobre la vocación sacerdotal. Ya lo he conseguido, y lo tengo en mi ordenador. Se llama “fishers of men”, pescadores de hombres. Es impresionante. Casi me hace llorar. Fantástico.
La verdad es que la historia es guiri a más no poder. La música, el ambiente, la velocidad con la que se precipitan los acontecimientos, el desarrollo acelerado de las historias... divertídisimo y, sobre todo, moderno. Y certero: explica fenomenalmente lo que significa ser sacerdote. Aparecen cinco sacerdotes que dan su parecer sobre su sacerdocio desde diversos aspectos. Entre estas declaraciones se suceden otras tomas que ilustran lo que han explicado, y, como línea de fondo, desarrolla la historia de un accidente de tráfico en el cual un sacerdote ayudó a morir a un muchacho de 20 años, moviendo al alma de un niño que veía todo y que, en ese momento, se decide a ser sacerdote.
El argumento central de la proyección es doble: muchos jóvenes son llamados al sacerdocio, sin saberlo; y todos tenemos deseos de hacer algo remarkable, extraordinario, notable.
El día de mi cumpleaños fue muy emocionante, os lo reconozco. Me da un poco vergüenza contar estas cosas, pero bueno... El año pasado quizás si me llamaran 10 personas y recibiera algun mensajito de móvil. Este año, me he tomado la molestia de contarlos, recibí: 26 llamadas telefónicas, 46 SMS y 53 correos electrónicos. Y, os lo digo con el corazón, recordaba aquello de que “el que deje padre, madre, hermanos o tierras por mi nombre recibirá ciento por uno en padres, madres, hermanos y posesiones ya en esta tierra y en la vida eterna”. Si alguién tiene miedo de perder algo que sepa que le entiendo: todos hemos tenido esa sensación. Estudios, niñas, familia, hijos, un buen coche (algunos lo considerabamos prioritario)... Qué pasada, ciento por uno y aún te quedaste corto.
He tenido que abrir muchos cerrojos antes de contar esto, pero antes de echarlos de nuevo aún os cuento una más. Una cosa que me impresionó mucho cuando me ordené era que gente muchísmo más valiosa que yo, y con muchísimos más años, me pidiera consejo a mi, un tipo de 25 (ahora 28) años. Me sigue impresionando muchísimo. Me estremece y me emociona. Parece que se dan la vuelta a las palabras del Señor: “Donde esté mi servidor, allí estaré yo”. ¡Qué pasada!. Remarkable, extraordinario, notable. Perdonadme por volver a un tema ya comentado, pero me da que las palabras se quedan cortas...
Mañana quizás volvamos a la carga con el tema de las palabras del Papa. Entre tanto, seguro que todos tenéis un montón de historias sobre lo maravilloso de vuestro matrimonio o de vuestra juventud. Contad con él. Y contádnoslo a nosotros. Remarkable, extraordinario, notable.

Pensemos...

Es fácil caer en la demagogia cuando se trata cualquier cuestión, sea cual sea su relevancia social. Es fácil aumentar los problemas, darles una cobertura informativa desmedida, cuando se trata de llenar páginas y ganar lectores. Es fácil valorar las cosas, sin pensar mucho y razonar menos, llevados por la pasión del momento y el espíritu universal de opinar de todo, sea cual sea el asunto.
Este conjunto de factores se suman en el cóctel peligroso que ha explotado a raíz de las palabras de Benedicto XVI con ocasión de su estancia en Baviera. No es difícil ante esta cuestión caer en valoraciones carentes de ningún peso y que conviene no esgrimir. Se puede poner fin a la cuestión en nuestros círculos de amigos arguyendo que cómo demonios se atreven a juzgar unas palabras absolutamente delicadas y carentes de contenido ofensivo aquellos que no respetan los derechos humanos en ninguna de las naciones que gobiernan. Pero esto significa agostar una reflexión que, sin duda, puede ser fecunda. Es evidente que gran parte de esta polémica es fruto de la difusión mediática, muy interesada en condenar a muerte a muchos y vender aún más. Y, finalmente, para otros será aún más sencillo poner fin a todo esto diciendo que los curas a la sacristía y fin de los problemas; o que no nos debe extrañar estas reacciones a semejantes declaraciones.
Pero, ¿por qué pasan estas cosas?. ¿Qué ocurre en este mundo para que, una caricatura más o menos ofensiva de Mahoma o una cita erudita del Romano Pontífice ponga a tantos en pie de guerra?.
Conviene recordar que el objetivo el discurso del Papa no era, en absoluto, lo islámico, sino las relaciones entre fe y razón. En este contexto, no todas las religiones se ponen en pie de igualdad. En la religiones cristianas, existe un diálogo entre ambas que ha traido, entre otras cosas, potentes avances en nuestra civilización, tales como la libertad religiosa o los derechos del hombre. Sin embargo, en el mundo islámico esta relación carece de sentido, pues la fe es norma absoluta e única que anula cualquier desarrollo racional. Buena muestra de ello es la carencia, con honrosas excepciones en el correr de los siglos, de teología musulmana. Existe únicamente exégesis (explicación) de los textos sagrados, pero en ningún caso diálogo con la cultura o razonamientos de origen filosófico. Esta actitud genera un modelo social y político que se traduce, palpablemente, en la carencia, por ejemplo, de derechos tan básicos como la libertad religiosa en los países islámicos.
Esta controversia nos permite concluir, de momento, dos cosas: por un lado el agradecimiento a la herencia cristiana que permite participar de una civilización del derecho y la libertad. Sólo en los países de tradición cristiana se ha erigido una sociedad de derecho. Por otro, la estremecedora cuestión que se esconde, como telón de fondo, en toda esta polémica: ¿dónde está hoy la fuerza de occidente?. Una sociedad culturalmente muerta, como es la nuestra, es susceptible de ataques de este género. La potencia económica y militar de occidente no es absoluto correspondida por unas convicciones propias capaces de defender lo que de hecho es suyo. Por eso, es susceptible de todo ataque, acoso y derribo.
Tenemos un serio problema: la flacidez de nuestras mentes. Otras culturas, mucho más bárbaras son, no obstante, mucho más fuertes. Occidente debe pensar. Y debe exigir, como mínimo, y en primer lugar, reciprocidad: más allá del mediterráneo están hartos de ver cómo los suyos reclaman derechos en occidente y se les concede, mientras que ellos disuelven libertades tan básicas como la libre expresión de opiniones o el derecho a convertirse a la religión que uno desee o construir una iglesia. Mientras no haya reciprocidad estaremos en clara desventaja... y seguirán sucediéndose desproporcionadas reacciones como la que estamos viviendo.
Occidente es un cuerpo sin alma alguna. Y lo inanimado acaba por oler y ser cadáver. Occidente, ¿donde están tus principios?.

domingo, septiembre 17, 2006

Movimiento

“Donde hay movimiento hay vida”. Así definía la vida universitaria un sabio inglés del XIX, que encabezó una de las manifestaciones más potentes de la fecundidad intelectual del Oxford decimonónico. Él, con un grupo de amigos compañeros suyos (profesores y doctores), decidieron pensar de nuevo su sociedad, sus valores, su religión. Buscaban la autenticidad de las doctrinas recibidas, y hacer crítica de su mundo y de su ambiente. El resultado fue un auténtico terremoto en las islas británicas: cientos de jóvenes escuchaban cada semana a John, que así se llamaba, en la iglesia universitaria de St. Mary. Los ‘colleges’ retrasaban sus horarios, ya que de otro modo no veían a sus estudiantes en la hora de la cena. Se multiplicaban los comentarios, los dimes y diretes, los artículos universitarios. Y poco a poco, todo aquello saltó a la prensa. ‘Oxford movement’ fue un claro ejemplo del poder de las ideas y de la fecundidad de un movimiento. Años después, en 1845, John Henry Newman decidió convertirse al catolicismo. El que había sido durante decada y media referente del anglicanismo y de la sociedad inglesa se convertió así en un proscrito. La difamación de su nombre duró muchos años, hasta que en la década de los 60 un tal Kingsley, a la sazón capellán de la reina, le robó su fama, quizás para siempre, a través de sus difamatorios artículos en la prensa inglesa. Entoces Newman reaccionó, y escribió la historia de su vida en ese mismo periódico. Era leída por miles de ingleses, que expectantes esperaban la siguiente edición de su apasionante historia. Su fama quedó restituida y, sobre todo, generó una nueva corriente de pensamiento crítico sobre su sociedad y cultura que dura hasta hoy.
Nuestro blog también tiene ‘movimiento’, y por eso mismo, vida. Los muchos comentarios recibidos en estos días ponen de manifiesto que aquí estamos más que los cinco amigos que, desde Oxford, decidiron ser inconformistas. No todos aquellos llegaron a las mismas conclusiones: Newman vino al catolicismo, Froude y Keble, sus mejores amigos, murieron anglicanos. Probablemente nosotros mismos, con el tiempo, tampoco tendremos la misma opinión de las cosas. Pero quizás, como aquellos, podamos generar una nueva corriente de inconformismo que gane muchas conciencias para un camino mejor. Ya hemos comenzado a hacerlo.
El día en que no haya comentario alguno entonces habrá que pensar si este movimiento murió, quizás todavía muy joven. Entre tanto, ten ánimo de expresar tus ideas, pues mientras no sean ofensivas hacia nadie ni contengan palabras que hieran sensibilidades, serán publicadas. Y, sobre todo, serán la riqueza de un blog y, por qué no, de una cultura nueva.
P.D.: Si alguién sabe cómo ponerse en contacto con Juan Manuel de Prada que me lo diga. Me gustaría intentar hablar con él o mandarle un mail...

sábado, septiembre 16, 2006

Un dibujo

¡Cuánto ha dado de hablar las últimas colaboraciones!. Verdaderamente es un tema candente, del cual cada uno puede y debe tener su propia opinión. Yo, por lo menos, tengo la mía, y quizás la semana próxima pueda poner las ideas en orden y contarlas a la 'opinión pública'.
Como muchos sabéis, ya estamos preparando el viaje a Sydney para dentro de dos años. Resulta que muchos de los chicos tienen que sacar el dinero, y lo pensamos hacer a base de vender cosas a la salida de la parroquia, el bar del rastrillo parroquial, la lotería de navidad...
Una última idea consiste en hacer un montón de polos y camisetas y ponerlas a la venta. Pero para eso es necesario un escudo o algo semejante. En la página web oficial del encuentro mundial de jóvenes 2008 podéis ver el logo elegido por los australianos. A mi me gustaría que todas las ideas que tuviérais las enviarais a fulespa@yahoo.com. Hacéis vuestro dibujo y lo enviais a esta dirección, de modo que así podamos elegir un escudo o logo chulo para hacer las camisetas. Decídselo a amigos vuestros que dibujen bien o tengan buenas ideas. ¡Puede salir algo muy chulo!.
Confío en vuestras colaboraciones. A ver si entre todos sacamos algo bueno.

jueves, septiembre 14, 2006

Bromas las justas

¡Qué gusto tenemos a veces los seres humanos de frivolizar sobre cosas importantes!. Se juntan cinco tipo en un bar, con unas buenas cervezas, y las machadas, a veces, suben y bajan como la espuma. Y no somos en absoluto conscientes del mal moral que eso causa, tanto para los maledicentes como al resto de la sociedad en general. Por eso, y porque sé que no siempre se leen los comentarios a los artículos del blog, quiero que echemos todos un vistazo a la colaboración que llegó ayer de 'medico de la paz' comentando "un proyecto familiar". A mi me dio muchísimo que pensar: nunca se puede bromear con determinadas cosas. No es que lo haya hecho, pero creo que se puede extrapolar a un montón de cosas que, para muchos, suponen un auténtico drama. Lee con atención... y luego me cuentas.
Querido Blogger,

Un Proyecto Familiar, ¿DÓNDE ESTAN LAS FAMILIAS?

Llevo dos días de "anales" para mis queridos polskys...

Ayer tuve que atender en urgencias a una mujer, brutalmente apaleada por su "PAREJA SENTIMENTAL"...

Tenía 2 hijos, ninguno de este señor... Los dos de padres diferentes... Ninguno vivía con ella...

La atendimos entre varios, un cirujano maxilofacial, amigo mío, me dijo: "No me creo que se haya caído como dice ella, las lesiones no son congruentes".

Di parte al juez... Nariz rota, hematomas por todas partes, una mujer molida por dentro y por fuera...

Una mujer sin Dios, sin esposo, sin cariño... "Muerta en vida"...

Me sorprendió mucho, a la noche, cuando le puse el tratamiento se fue... Se fue de nuevo... Con su "Compañero Sentimental"...

Se que es dificil denunciar... Que se pasa miedo... Que es injusta muchas veces la Vida con estas mujeres...

Pero todavía tengo en la cabeza a otra "Mamá", esta vez ella si que había denunciado...

Pero no había servido de nada.Me contó que tenía miedo, mucho miedo...

Su "ex-" la había esperado en la calle, era de día, las 12 de la mañana, de un domingo...

Ella siempre salía de dia, tenía miedo... Y esta vez sus miedos tenían razón...

Nos la trajeron "cosida a puñaladas"... De trauma a la general, a la sala donde yo estaba... De ahi a la sala de Reanimación...

Todavía recuerdo su cara rota... Varias vías una en cada brazo y otra vía central directamente en la Femoral... Liquido a chorro, las bolsas de sangre que no venían...

Tenía porque luchar, me lo dijo... 6 Niños le esperaban en su casa.

Ella sí que tenía porque luchar por sus hijos... Creo que ahí la importancia de la Familia... Da estabilidad y alegría, esperanza e ilusión...

Y muchas veces la familia da sentido a la vida... Esta mujer salía a la calle, tenía que trabajar como ella decía... Por sus hijos...

Desde entonces me cuesta ver en la tele las noticias, cuando le pones cara a esas mujeres maltratadas, todo cambia.
Lo ves todo más cerca, en primera fila, y no le puede dejar impasible a nadie. Y menos a un médico jóven con ideales que lucha por la vida... Desde la concepción hasta la muerte...

miércoles, septiembre 13, 2006

Un proyecto familiar

"¡No se le ocurra hacer eso!". Resulta que caminando por la plaza de oriente iba yo pensando entonces en lo 'cutres' que podemos ser: hacía poco había sido la boda del príncipe y resulta que, pocas horas después del enlace ya habían robado la mitad de las flores. Sumido en estos positivos pensamientos me fijé en unos operarios que estaban quitando los hierros que sostenían los diversos motivos florales y ornatos eclépticos. Y en estas, un tipo me espetó: "¡no se le ocurra hacer eso!". Yo no entendí, e ingenuo de mi, sumido aún en personales reflexiones y la alegría de haber sido ordenado apenas 15 días antes le pregunté: "¿a qué se refiere?". "Me refiero a pasar por debajo de la escalera: da mal fario". Obvia decir que pasé por debajo de la escalera, y si llega a pasarme esto un año antes, sin vestir de 'cura', quizás habría hecho una rotonda y habría pasado diez o doce veces. ¡Mal fario!. Madre mía.
Total, que tiempo después vamos a Polonia. Tomamos 4 aviones. Madrid-Zurich, Zurich-Varsovia y al revés. Ningún avión de los cuatro tenía fila 13. No sé que pensarían los de la 14, pero lo cierto es que la 13 no existía. Razón: "da mala suerte".
Finalmente leo unas declaraciones de Alonso, el prohombre del automovilismo español: "no creo en Dios ni en nada en absoluto". Y cuenta sus 'ritos' previos a cada carrera. Repite hoteles si gana la carrera, retira el saludo a aquellos que considera culpables de que se queme el motor (quizás la azafata de Camel o el limpiabotas), y un largo etcétera de supersticiones. La suerte es la suerte.
Conclusión: G.K. Chesterton. "Cuando uno deja de creer en Dios pasa a creer en cualquier cosa". Por eso, es necesario no sólo tener fe, sino mantenerla. La parroquia comenzará, en breve, un plan muy ambicioso con un único objetivo: la fe en la familia. Una apuesta por la santidad. Se piensa en un grupo de novios, otro de matrimonios recien casados y un tercero de matrimonios con experiencia. Además, cursos prematrimoniales, cursos de regulación natural de la fertilidad, escuela de padres, catecumenado de adultos... Hay matrimonios encargados de cada actividad (pronto sabréis que os ha tocado, y seguro que os encanta). Y hay mucha gente dispuesta a colaborar. De momento, toca rezar, para que las cosas salgan bien.
Los frutos de todo esto pueden ser maravillosos, como lo están siendo con los jóvenes. De momento, sirva pensar que seremos mucho más libres: pasaremos por debajo de escaleras, nos sentaremos en la fila 13, y saludaremos al limpiabotas e incluso, los más lanzados, a la niña de Camel. ¿Por qué no?.

martes, septiembre 12, 2006

the family who eats together

Don't eat one another. O dicho en román paladino: la familia que come junta no se comen unos a otros. Esta frase me la dijo un sacerdote inglés se ve que a fuerza de mucho pensar.
Ha dicho la vicepresidenta que hay que buscar "soluciones imaginativas" al problema de la inmigración. Será cierto. Pero la idea me parece sugerente con respecto a la creación de una sociedad nueva y un mundo mejor. Es necesario buscar algo más ámplio que "soluciones habitacionales" para nuestro mundo...
La primera, vieja como el mundo mismo, pero eficaz como ninguna, es "the family who eats together". Una ración de vista vale más que miles de libros de la más profunda ideología. Y en este sentido una familia unida es como un panzer de la guerra mundial, de los cuales se decía que pasaban por encima de todo aquello que se pusiera por medio. El cristianismo, no te engañes, se contagia por envidia, y me da la sensación de que muchos sois muy capaces de generar gran cantidad de esta versión sana del pecado capital. La alegría de los miembros, la espontaneidad de las expresiones, el cuidado de unos respecto de los otros... no resulta ajeno a casi nadie. Es normal que los enemigos del hombre quieran destruirla, y por lo mismo queda acogida la moción de un comentarista: pronto no sólo los jóvenes disfrutaran de una formación de calidad en la parroquia. Prometido.
Y como estas mil mas. Me contaba un muchacho, el otro día, que se cruzó con una de los que habían venido a Polonia. "Esta chica me produce una mezcla entre envidia y admiración". Así tiene que ser.
A rio revuelto, ganancia de pescadores. Pronto mucho más, porque ahora es muy tarde y mañana un día agitado...

Encuentros en la tercera fase

Perdonandme la sinceridad, pero si a mi me dicen hace doce años (y digo doce muy conscientemente, si azar ninguno) que una parroquia es o puede ser lo que poco a poco se ve en Santa Teresa Benedicta de la cruz, os aseguro que no me lo creería.
"Collectio frikis", o sea, una colección de Frikis. Esta es la mentalidad dominante sobre lo que es una parroquia. Uno piensa que va a entrar en un lugar lleno de antenas, marcianos, gente encerrada en un corralín de escasa altura y mínima profundidad. Los buenos, los que quieren apostar e ir a por todas, ven el percal y ponen pies en polvorosa (o en Pontevedra, como dice Gomaespuma), huyendo de un universo tan minúsculo. Al menos, eso mismo pensaba yo.
Luego llegas al seminario... ¡para aprender a ser cura de parroquia!. Es cierto que hay mil opciones: el estudio, las capellanías, rectorados, o, incluso, la escuela diplomática. Pero lo más normal es que te toque esto: una parroquia. Y te mandan a una, y apredes unas cosas. Y te mandan a otra, cuyos frutos son evidentes (véase Antonio, cuyo volumen es poco disimulable), donde te lo pasas bomba y aprendes otro montón. Y finalmente te das cuenta de que se puede apostar por la santidad sin discriminar a nadie ni empequeñecer conciencias. ¡Claro que sí!. Y en esas estamos...
El viernes vimos una presentación fotográfica de nuestra estancia en Valencia con el Papa. Un éxito. Pronto pondremos esta misma proyección a las familias asistentes al encuentro y a quien quiera verlo. Luego se expusieron los objetivos de los dos próximos años. Más éxito todavía. Por cierto, que si alguien quiere saber con exactitud qué demonios (quizás no es la palabra más indicada) se hace en una parroquia, que lo pida mediante un comentario y dejando su dirección de mail. Se lo mandamos encantados.
La reunión se saldó muy positivamente: ya hay más de 50 muchachos con ganas de ir a ver al Papa a Sydney dentro de 2 años, 17 que visitarán a ancianos los sábados, 10 catequistas de comunión, otro grupo semejante que comenzará a cantar y tendremos así el deseado coro de gente joven... ¿Donde están los frikis?. Quizas en Rajajá o Pachá, porque aquí no veo muchos. Lo que si veo es una alegría y, ojo al dato, unos chavales que tienen mirada limpia, cosa cada vez menos habitual.
Por eso, repitamoslo hasta convencernos: "crisis, What crisis?".
P.D.: mañana, en ABC, ojo con las cartas al director. Echadle un vistacillo.

lunes, septiembre 11, 2006

Fuma, pero no vive

Lo dicho. El Levante no es el inter de Milán, pero no va mal la cosa. Y vuelvo a la carga: lo importante, me parece a mi, es que el Madrid este año no encajará más de 35 goles. Ya lo veréis. De hecho, me enfadé un poco por el gol recibido. Este tipo de cosas no pueden pasar, con 6 tíos de 85 kilos en la linea de atrás.
Y es que lo importante es no encajar goles. En este sentido, me parece fenomenal que el ministerio de sanidad nos exhorte a no fumar. Es fantástico. La campaña publicitaria creo que es conocida por todos: una niña de 9 años fuma 25 pitillos al día (10 de su padre, 8 de su madre y 7 al salir a la calle). Un bebe, no se cuantos. Y un niño en el vientre de su madre, ya fuma otros 12 pitillos gratuitos a cuenta de los progenitores.
No se trata, en absoluto, en este artículo de hacer la típica demagogia (con la que estoy plenamente de acuerdo) que defiende al fumador. Los tiros no van por ahí. El objetivo es uno y único: o sea, que el ministerio de sanidad dice que un embrión humano fuma, pero no vive, porque es susceptible de ser eliminado. Y ambas cosas con fondos del estado. ¿Qué demonios es esto?. Contradicción es poco. A ver si lo he entendido bien: debemos no fumar porque daña la salud del embrión, y sin embargo podemos eliminarlo de raíz. ¿Qué locura es esto?. E insisto: esta denuncia no va en absoluto dirigida contra las campañas anti-tabaco, sino contra las campañas anti-vida, que, creo yo (vamos, no creo que haya que se Einstein para sostenerlo), suelen ser también anti-salud.
Piénsalo despacio: Fuma pero no vive. ¡Protege sus salud, pero descuida: su vida no merece SIEMPRE la pena!. ¡Qué sociedad!. Y qué suerte tener perspicacia para ver estas cosas. Díselo a mucha gente: da que pensar. De hecho, este mismo artículo va empaquetadito ahora mismo a la dirección de 'El Mundo', 'La Razón', 'ABC' y todo lo demás. A ver si cae en algún medio. Entre tanto, sea difundido por la red.
Cambio de tercio. ¡Éxtasis de visitantes!. Ya no bajamos en ningún caso de 80, y con una internacionalidad apabullante. ¡Ójala esos lectores lejanos (india, Irán, EE UU...) entraran en contacto con nosotros. ¿Os imagináis una convivencia en Cagliari (Italia)?. Fabuloso.

domingo, septiembre 10, 2006

Un domingo en la vida de un cura

Un día delicado. Un domingo en la vida de un cura no es, ni de lejos, el mejor día para actualizar el blog con algo de interés. Son muchísimas las actividades y no es fácil sacar tiempo, sobre todo desde que un infortunio telecomunicativo nos dejó sin ADSL y hay que hacer las cosas via telefónica, o sea, a pedales.
Así, por ejemplo, hoy: confesiones todo el día, una Misa, comeré con un gran tipo (;D), visitaré a una familia de la parroquia (tomando un café, por supuesto), luego iré a ver a un niño que, ante el aburrimiento veraniego, decidió pisar cientos de cristales sin ser fakir (total, una operación de todos los tendones del pie, con inquietud consiguiente de si podrá jugar al fútbol). Luego, por la tarde, último día de Misa de 21h. ¿Qué tal?.
Pero lo más importante: tenemos un lector australiano. Mágnífico enganche para nuestro proyecto de ir a Sydney dentro de dos años. Por cierto, que a día de hoy ya hay apuntadas más de 50 personas. Increíble. Esto es apasionante, no cabe duda.
Por cierto, ayer el atlético jugó como nunca... y perdió como siempre. Pero lo que me encantó, de nuevo, es Andrés Montes. Como una regadera. Un tipo fantástico.

sábado, septiembre 09, 2006

Dos meses después de Valencia

Ayer tuvimos reunión de jóvenes en la parroquia. El lunes os cuento, cuando me de tiempo a pensarlo. De momento, las primeras impresiones, óptimas. ¡Qué gozada de gente joven!. De nuevo me viene a la cabeza Andres Montes, al que ya casi le tengo amarrado para los ejercicios espirituales...
Atentos a la colaboración que reproducimos hoy. Merece muchísimo la pena.
Se cumple ya un mes [me lo envio el mes pasado, pero estabamos en Polonia] de la celebración del V Encuentro Mundial de la Familia en Valencia y de la visita del Papa Benedicto XVI (la primera como Pontífice). Recuerdo ahora que días antes de salir para Valencia me entraron algunas dudas sobre el viaje; sólo con pensar en el calor húmedo, en dormir sobre suelo duro en un saco, el sol cayendo a plomo…¡Uf, qué pereza! Con lo tranquilo y fresquito que se está en la piscina de casa. Claro que entonces no imaginaba ni por asomo el gozo y el ánimo que iba a suponer el encuentro de marras.

Llegué a Valencia el jueves 6 por la noche. A los pocos minutos ya tenía los ojos vendados y la cara metida en un plato con trozos de pepino y tomate buscando desesperadamente un garbanzo (!). Ya no me acordaba de lo divertidas que eran estas dinámicas de grupo (qué lejos quedan las convivencias parroquiales juveniles). Al día siguiente, después de una estupenda noche en colchón de baldosas en la que descubrí mi vocación de faquir, nos acercamos a la Feria Internacional de las Familias. En el camino fuimos dando el cante (en sentido literal y figurado). Yo no entendía por qué la gente nos miraba tanto; al fin y al cabo los demás grupos que deambulaban por Valencia también iban vestidos de uniforme: de amarillo y blanco, con gorras, mochilas, banderas españolas y vaticanas, y estandartes. Pero algo, algo tendríamos, que al llegar a la feria se nos acercó una periodista a hacernos fotos y otro con una cámara de televisión.

Total que primero estuvimos en el congreso de hijos. El secretario de la conferencia episcopal española, Rv. P. Juan Antonio Martínez Camino (ése que sale tanto por la tele), nos habló de la política educativa del gobierno, de la errónea educación sexual que pretende implantar en el colegio, y de que tenemos que superar nuestro miedo para transmitir la fe con libertad y esperanza (dentro de lo que cabe, no estamos viviendo el peor de los tiempos). Luego hubo 4 charlas muy cortas sobre la libertad religiosa en la universidad, en el trabajo, en el mundo político y sindical, y en los medios de comunicación. Entre otras cosas, se habló de despertar una comunión cristiana joven, de la necesidad de la comunión eclesial como testimonio de unidad para resultar creíbles, y de que los cristianos tenemos que negarnos a la transformación de nuestro estado aconfesional en estado laicista. En el turno de preguntas, una joven de nuestro grupo planteó una cuestión que fue muy aplaudida por el auditorio. Entretanto, yo me escabullí momentáneamente a la sala de al lado, donde se estaba celebrando el congreso teológico-pastoral con ponencias de obispos, cardenales y representantes de otras confesiones cristianas. Después fuimos al pabellón del ocio en familia. Había multitud de juegos y actividades para niños y jóvenes. Algunos nos acercamos a toda prisa al circuito de karts, pero, al comprobar que no alcanzaban precisamente la velocidad de Fernando Alonso, optamos por jugar al baloncesto, al voley o al enredos. Me quedé con ganas de probar el rocódromo y la tirolina. Pasamos luego a la zona de los puestos (‘stands’) de los movimientos y asociaciones católicas. Había multitud de ellos, de los cuales desconocíamos muchos. Esto le lleva a uno a pensar en la enorme diversidad y riqueza humana de la Iglesia. Al abandonar el recinto ferial, vimos a algunos del camino neocatecumenal bailando en corro, al que se acercaban muchos curiosos.

Después de comer y de una más que apetecible siesta (los más jóvenes se echaron un partido de fútbol para bajar la comida) nos fuimos ¡a la playa! Tras 2 fabulosas horas en remojo haciéndonos ahogadillas y cogiendo olas, nos preparamos para el rosario comunitario o, mejor dicho, multitudinario. Era impresionante ver kilómetros de playa rebosando de gente que se había reunido para rezar juntos y en familia. Ya de noche, y con miles de velas encendidas, el espectáculo era sobrecogedor. Creo haber oído el número de 300.000 asistentes.

El sábado por la mañana nos levantamos no muy pronto, tuvimos la oportunidad de confesarnos y celebramos la Eucaristía. Salimos rápido a ver al Papa, que había aterrizado hacía un rato. Le vimos pasar 3 veces. La marea amarilla de peregrinos era incesante. Había muchas bandas de música a lo largo del recorrido y se soltaron globos y mucho confeti. Por la tarde fuimos por fin al recinto de la ciudad de las artes y las ciencias, donde tendría lugar el acto de clausura del encuentro. ¡Menudo ambientazo! Éramos del orden del millón de personas. Había familias enteras con abuelos incluidos. Algunos niños aprovechaban para refrescarse en unos estanques y canales que había por allí (y de paso, juguetear con las ranas del ecosistema). El Papa llegó sobre las 21.00 (le volvimos a ver pasar, claro). La ceremonia duró unas dos horas. A mí se me hizo corta. Pudimos seguirla en las pantallas gigantes. Hubo testimonios de varias familias de todos los continentes. Entre ellas, un actor italiano arrancó una carcajada del Papa y del público al contar que cuando le preguntan cuánto tiempo lleva casado responde: “–45 años­–. ¡¿45 años?! ¿Con la misma mujer? –Sí, sí, con la misma–.” El Papa defendió la familia de toda la vida como fundamento de la sociedad, habló de la gran tarea de la familia de formar personas libres y responsables, de la transmisión de la fe a los hijos (la familia, Iglesia doméstica), y, por último, destacó el importante papel de los abuelos en las familias. La ceremonia finalizó con un impresionante espectáculo pirotécnico.

Ya bien entrada la noche, algunos del grupo se unieron a jóvenes de otros grupos que estaban tocando la guitarra y cantando o se fueron “de marcha” por el recinto. Otros nos acercamos al ‘café vocacional’ a curiosear. Se celebraba en un hotel. Tuvimos que hacer cola para entrar como si fuera una discoteca. Estaba plagado de gente joven, adolescentes y pequeños. Consistía en lo siguiente. Había una capilla con exposición del Santísimo donde poder hacer oración. Bajando unas escaleras, habían improvisado unos confesionarios con biombos y se hacían confesiones en idiomas. Estaban llenos de chavales, ¡a las 2 de la madrugada! Más abajo había una sala amplia que tenía ordenadores con acceso gratuito a internet, con un escenario donde cantaban canciones religiosas y también salían algunos sacerdotes a contar su testimonio. También había una barra en la que te podías tomar un refresco o un café. Se trataba de ofertar otro tipo de ocio para los más jóvenes, combinando la faceta lúdica con la religiosa. A la salida recorrimos el recinto del encuentro de noche. Vimos otro corro de neocatecumenales y a las hermanitas de los ancianos y gente cantando aquí y allá. Reinaba un ambiente muy alegre y entretenido. Me resultó curioso ver a tantísimas familias durmiendo en sacos al aire libre, mayores y pequeños (incluyendo bebés). A pesar del cansancio acumulado, esa noche nos acostamos a las 5.30 aprox. Nos levantaron a las 7.30, o al menos eso pretendieron. El domingo, la Eucaristía puso el punto y final al supermacroencuentro multitudinario con el Papa. Por supuesto, le volvimos a ver pasar en el papamóvil, la 5ª vez (es que somos unos frikis). Por cierto, molaban sus gafas de sol.

Me llevé muy buen sabor de boca del encuentro. Le anima a uno ver a tantas familias juntas compartiendo un mismo denominador común: la fe en Cristo. Estamos acostumbrados a escuchar en los medios de comunicación noticias tristes de índole social y relativas a los jóvenes. Sin embargo, en Valencia pude presenciar otra cara muy distinta de la sociedad y una juventud sana, solidaria y comprometida con el Evangelio. Una juventud que merece la pena. Volví de Valencia con más fuerza, mucho más animado y esperanzado.
Hay que agradecer la presencia testimonial del Papa Benedicto XVI en España (y la iniciativa de Juan Pablo II).
Anda que si por pereza me llego a quedar en casa…

viernes, septiembre 08, 2006

secretum meum mihi

Antes de entrar en tema: hoy planteamiento de los dos próximos años en la parroquia para jóvenes. A LAS 20H30. Invita a todo el mundo. Te esperamos.
¡Qué lluvia de correcciones, matices y contramatices!. Tan terrible es, que algunos comentarios incluso no los entiendo. ¿Qué tiene ser sacerdote que, como mínimo, suscita tantísima actividad (en algunos casos, polémica)?. ¡Cuánto se agradece las colaboraciones!. ¿Recordáis aquello: "queridos jóvenes, con vuestras aportaciones convertís este momento en un diálogo"?. Fue Juan Pablo II en cuatro vientos, al poco de decir: "si hoy escuchas la voz de Dios que te dice 'sígueme', no la acalles". Se ve que siempre pasa lo mismo.
¿Quién dice que la única forma de sentir el bufido del toro sea siendo sacerdote?. Yo digo que siendo sacerdote se está en la arena, pero sería una barbaridad decir que es la única manera. A mi es lo que me ha tocado, y estoy encantadísimo con ello. Pero me consta que a otros les tocó otra cosa, y torearon bastante mejor que un servidor. Por eso, amigo/a, fuera el purito y la copa y a la arena, porque esto te incumbe a ti también.
Secretum meum mihi, dice la escritura. Los subproductos LOGSE no entenderán, y si me apuras tampoco los del bachillerato BUP. "Mi secreto es para mi", que decía el profeta Isaías. Por eso, insisto, quien quiera saber puede venir cualquier día y, quizás, personalmente, pueda sacar algo en claro.
Ahora bien, considero justo tener que decir algo, ante los abundantes comentarios. ¿Nunca has experimentado que todo lo que te rodea es estupendo, que tienes un hueco en el mundo, que sabes que tienes una misión importante y que hay una diferencia casi absoluta entre lo que eres y lo que haces? Eso es ser sacerdote. Mi experiencia es la siguiente: "seréis capaces de hacer cosas más grandes que las que yo hago" (Evangelio de san Juan). Se cumple la promesa del Señor. A cien por cien. Y eso que uno es bastante mediocre. Es impresionante contemplar cómo los enfrentados se reconcilian, alguno salva su vida (física), otros sanan, uno muere en paz, el otro recibe consuelo... No es siquiera imaginable lo grande que es estar al lado de las personas en los momentos más decisivos: nacimiento, matrimonio y enfermedad-muerte. No es siquiera imaginable la experiencia que supone una hora de confesonario. No es siquiera imaginable lo que significa Nuestro Señor Jesucristo a 20 centímetros de ti.
Una vida cargada de sentido. Eso es lo que es la vocación cristiana, cualquiera que sea, y en ellas se cumplen las máximas expectativas de la persona humana. En ellas se hacen presentes de modo sobresaliente las promesas del Señor. Y a mi me tocó esta, y estoy encantadísimo. Y pienso que a muchos más les toca, pero a veces falta cabeza y corazón. Bueno, cabeza, corazón y quizás una tercera cosa...
Tengo un testimonio fabuloso de Valencia. Hoy se cumplen dos meses desde que comenzó este blog fruto de la visita del Papa. A partir de mañana podréis leerlo. ¡Es fabulos y divertidísimo!. Hasta mañana.

jueves, septiembre 07, 2006

El secreto del Vaticano

Opencor. Dos de la tarde. Muestario de libros a la venta: el secreto del Vaticano, el misterio de la orden templaria, el evangelio de Judas, la código da Vinci (que como dice el Evangelio de San Juan: 'ya huele'), ángeles y demonios y algunos libros más de este género, cuyo título no recuerdo, pero que van en esta línea: el testamento hipertrúpico de María Magdalena (pobrecilla), la verdad supersónica de la estafa crucificada y un pequeño etcétera.
A mí a veces me entran repeluses interiores al pensar: ¿habrá algo de verdad en alguno de los seis mil ataques que uno recibe al día?. Cuando pasan estas cosas, que a veces pasan, conviene ser un poquito normal. Parece fácil pero no lo es. Entonces yo entro en mi parroquia y me dedico a observar: lo mucho que lucha la gente, el muchísimo bien que se puede hacer, las cantidades que nos quedan por pagar (glub), y la inexistencia de cuentas bancarias secretas en suiza a nombre, por ejemplo, de Clive Ganswein. Si esto es una estafa, por lo menos, que de dinero, ¿no?.
Que no nos vendan camelos, por favor. Lo pienso a menudo: soy jerarca de la Iglesia porque, después de todo, soy cura. ¿No debería estar enterado de esos cientos de miles de secretos?. He estudiado 7 años teología, he leído los apócrifos, los padres de la Iglesia, los medievales, y los escritores modernos y contemporáneos. Nos hacen estudiar latín y griego. Algunas obras las leemos en lengua original. Y, de verdad, no descubro ninguno de esos rollos que inventa un norteamericano en su despacho. Y lo peor de todo: no me lucro con ellos, al contrario que los calumniadores. ¿Más claro?.
Ojo a los comentarios de ayer y antes de ayer en el blog. Interesantes. Un anónimo pide razones para ser sacerdote (¿te lo estás pensando?) y 'medicodelapaz' agita el cotarro con una metáfora muy bien traída, con la que coincido al 100% (se ve muy de cerca el arte del trato entre Dios y las almas cuando se es sacerdote). Pero me afinco en lo dicho: Ser sacerdote, ¡qué maravilla!. ¿Más explicaderas?. Una pista: el evangelio de hoy. Si alguien pide a lo largo del día una explicación de él, mañana la tendrá, y se podrá entender mejor qué significa ser sacerdote.

miércoles, septiembre 06, 2006

Las bicletas son para el verano

Que duda cabe: las bicicletas son para le verano. ¿Quién tiene tiempo sufiente para echar horas en invierno a tan honroso deporte?. Y eso por no hablar del Tour que, aunque constantemente bombardeado, sigue siendo un espectáculo. Pero, amigo, toca en verano. No cabe duda, las bicicletas son para el verano; y el barco, la playa, el fútbol, la lectura, la cerveza, la pamela...
Es verdad, el artículo de ayer era un poco capcioso. Que a algunos nos encante el invierno y nuestro trabajo no significa que la vacaciones sean un rollo. Acepto la moción, porque es verdadera. Pero también todo el mundo sabe que a través de los contrastes se subrayan más los intereses que se desean comunicar. Y lo que a mí me apetecía decir eran dos cosas: ánimo con el trabajo, y ánimo con la idea de ser sacerdote (quien la tuviera).
Animo con las labores ordinarias. El viernes de la semana pasada me contaba uno (no creo que te ofendas porque lo cuente) que había vuelto al trabajo, dale que te pego, con una alegría muy potente fruto de dos circunstancias: el descanso veraniego y las pilas cargadas en Polonia. Los compañeros le decían: oye, ¿por qué estás tan contento, si acabas de volver de vacaciones?. Y respondía: por eso, porque vengo descansado, y ahora es el momento de estar feliz. Además... ( y contaba nuestra estancia eslava). Ánimo, lector, ¡y a tope!.
Ánimo con la idea de ser sacerdote. ¡Qué maravilla!. Recuerdo que hace años, en Londres, estuve intentando explicarle a una coreana cómo era una corrida de toros. A pesar de su aspecto oriental, ponía los ojos como platos cuando se sucedían las explicaciones, acompañado de sonidos reprobatorios y estertores angustiosos. Así que desde entonces he decidido una cosa: las cosas verdaderamente grandes de la vida no conviene agotarlas con palabras sino que mejor es comprar un ticket de sombra y ver tranquilamente la corrida. Así que si quieres enterarte de algo, vente y te cuento.

martes, septiembre 05, 2006

síndrome post-vacacional

Fijaos en este pobre ser de mi izquierda. ¿Te sientes identificado con él? ¿piensas que podrías ser tú?. Si cambiaras ese ordenador por la obra donde trabajas, los libros de estudio, la plancha donde pones al día la ropa de los tuyos, el coche donde te atascas cada mañana en el tramo de la M-40 que va de Pozuelo a los túneles de 'El Pardo'... ¿podrías ser tú?. Si respondes que si, lee atentamente las siguientes líneas, si tu respuesta es no, congratúlate con ellas, y si no tienes ni idea de si 'si' o 'no', atento, porque te sugiero una salida profesional para tu vida.
Este verano he pasado, por primera vez en 4 años, unos días de vacaciones standard. O sea, playa levantina, piscina y pista de tenis, todo el día por delante y nada que hacer. Debo reconocer que este sacerdote católico sufrió un tremendo choque de realidad que se tradujo en un profudísimo shock (si se escribe así) vacacional. En efecto: ¡qué aburridas me parecieron las vacaciones!. Sufrí un sindrome Vacacional. Lo post-vacacional ha sido lo bueno. Conseguí volver a Madrid, a la Parroquia: gente entusiasmada por hacer cosas, ejemplos de personas que edifican cantidad, unos compañeros de trabajo estupendos, se deja fumar en el puesto laboral, incluso la pipa polaca... ¿y qué mas?. Muchísimo más. Es maravilloso volver al trabajo. Levantarse temprano (6h 15), ver cómo el día cunde un montón, tratar con un montón de gente, ir a comprar al DIA y al Opencor y ver de nuevo a los niños que vuelven contentísimos, pensar nuevas cosas para la parroquia... ¡qué gozada!. Bendito sea Dios por semejante trabajo.
Volvemos al comienzo. Si tienes sindrome post-vacacional, anímate, porque 'la vida puede ser maravillosa' (que tío más crack. Le voy a invitar a que de los ejercicios espirituales de la parroquia). Si no lo tienes, felicidades. Y si eres joven, varón, libre de vinculo y deseas una vida laboral plena lo tienes claro: ser sacerdote. Es un chollo.
P.D.: Recomendad este artículo, porque ahora mismo estamos creciendo a lo bestia en entradas. ¡Hay que aprovechar!.

lunes, septiembre 04, 2006

España gana

España gana. Si no fuera por el fútbol, donde no damos pie con bola, esto no sería una novedad. En atletismo nos hemos hecho un hueco entre los mejores en media y larga distancia, en gimnasia artística se acabó el imperio de los países del este, en tenis Nadal es una máquina, Alonso hace lo propio… En deportes de equipos tampoco estamos mal, con el balonmano, fútbol sala y waterpolo como nuestros mejores exponentes.
No conviene dar estos éxitos por supuestos. Hablando el otro día con un amigo inglés, bromeabamos diciendo que su país tiene suerte si gana al Cricket, sobre todo porque nadie entiende las reglas.
Lo mejor de todo es que esta unión de deporte y patria hace vibrar a muchos por valores que, a priori, no revierten un beneficio directo a las personas. Quiero decir: a nadie le suben el sueldo porque gane España, ni el típico novio pasota pasa a ser un tipo detallista, ni perdonan hipotecas, ni toca el gordo…
Recuerdo, a este respecto, una homilía del entonces cardenal Ratzinger, que comparaba el fútbol con la liturgia con motivo del comienzo de un mundial. A mi me parece que la gesta del equipo español de baloncesto nos recuerda que hay bienes de carácter moral que hacen muy felices a las personas. Que no todo está en el dinero y en el poder. Quizás ésto los apátridas no lo entiendan, así como aquellos que, como mi abuela, decían que el deporte lo componen hombres en calzoncillos que corren absurdamente detrás de un balón.
Lo mismo pasa con la virtud de la religión. No entra dentro de las cosas que, habitualmente, las personas consideran útiles. Y es una pena, porque se pierden una alegría muy superior a ganar un mundial. Vibrar por ser amigo de Dios, disfrutar nuestra condición de hijos del Padre, saber que la vida tiene un sentido y que por eso mismo sacamos partido a cada acontecimiento de la vida, por pequeño que sea.
Apúntate a ser cristiano. De verdad: no tiene sentido perderse tantísimas cosas buenas.

sábado, septiembre 02, 2006

Horarios

Una página de los horarios de la parroquia no vendrá mal a más de uno. Mañana, que es domingo 3, serán a las 10, 11 30, 13 y 21. Durante esta semana comienza la Misa de 7h30. Como decía en un comentario 'medicodelapaz', os recomiendo a todos que hagáis un esfuerzo. Es un modo estupendo de comenzar el día y, aunque parezca mentira, hay un ambientazo estupendo en la Iglesia a esas horas. Si a alguno piensa que le cuesta levantarse a esas horas, le invito a que recuerde al monaguillo, que está allí siempre, ya llueva, ya nieve, haga frío o calor... y no levanta más de 12 años. En fin, mucho ánimo.
El domingo 10 será el último con Misa de 21, y ya el lunes 11 pasaremos al horario normal de invierno. Pronto empezarán a rodar todas las actividades. No dejes de consultar, aunque aquí os informaremos, poco a poco, de las novedades.

Sydney 2008

Ya hay página oficial para el encuentro mundial de la juventud de Sydney 2008 (world youth day 2008, Sidney). Está bien echarle un vistazo porque comienza uno a cargar las pilas. El año pasado estuvimos en Colonia, y la única manera de dejar de mirar con nostalgia aquellos estupendos días es pensar lo buenos que serán los que están por venir.
Hay que mentalizarse de una cosa: todo el que quiera ir irá. El precio será desorbitado, porque un vuelo a Sydney, a día de hoy, no se hace por menos de 1100 euritos. Pero si empezamos desde ya, sacando dinero y, sobre todo, poniendo muchísima ilusión... ¡nadie se quedará en tierra!.
Es bueno que todo el mundo lo sepa desde ya: la parroquia Santa Teresa Benedicta piensa ir a Sydney a ver al Papa dentro de dos años. Es una oportunidad de oro que no podemos perder. Dentro de unos años lo contaremos como algo heroico, y será una experiencia única.
Pero hay que empezar ya. ¿Cómo sacar el dinero? ¿como prepararme?. EL VIERNES 8 DE SEPTIEMBRE, A LAS 20h30, HABRÁ CENA-REUNIÓN EN LA PARROQUIA. Ven, e infórmate. Y díselo a mucha gente, que para Sydney parece que queda mucho, pero no es ni una quinta parte de nuestra ilusión por ir...